Sofía Barat y la fiesta de Santa Teresa
Sofía Barat recibió inspiración de muchas personas de su alrededor (su hermano, el P. Varin…) y de algunos santos de la Iglesia que dejaron profunda huella en su vida.
Una de ellas fue Santa Teresa de Jesús, inconformista, tantas veces incomprendida y difamada… profundamente enraizada en Dios, de la que Sofía escribía «yo no podía dejar pasar el día de esta santa sin hablar de ella a mis hermanas. Les hablé del gran amor que esta santa tenía a nuestro Señor, que era tanto que la había hecho famosa bajo el nombre de «la amante de Jesús».»
En relación con los muchos percances que vivió Teresa, y también Sofía, «también una gran paciencia ante todas las dificultades y sufrimientos que tuvo que pasar para responder a su deseo de renovación en la Congregación de las Carmelitas. Esta paciencia ante las dificultades fue para ella el mejor testimonio de su amor. Les dije a las hermanas que esta es siempre la mejor manera de amar, también para nosotras: vivir con paciencia y humildad las dificultades y los sufrimientos que los trabajos por la salvación de las almas nos iban a suponer.«
«Pidamos a esta santa tan querida y tan grande, que nos conceda la gracia de imitarla»
Del diario de Poitiers – 14 /10 / 1807
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