MAGDALENA SOFÍA en mi vida
En mis años de colegio vivía las fiestas de la Santa Madre, como la llamábamos, con la ilusión que se vivía todo, y acudíamos a ella, poniéndole velitas e invocándola especialmente en tiempos de exámenes.
Ya en la Vida religiosa, era seguir el ritmo de la vida, las oraciones y las fiestas. Pero mi gran encuentro con Magdalena Sofía fue en la probación,que debido al capítulo general de 1967, la iniciamos en Jette, junto a su cuerpo, los tres primeros meses de la misma. Fueron momentos intensos para la Sociedad, por la dimisión de la madre de Valon, y para nosotras que estábamos en los ejercicios de mes ¿qué estaba sucediendo? Pues nos llegaban noticias muy confusas. La sabiduría y el buen hacer de la Madre Dessain, nuestra maestra de probación, nos guió a poner esa confianza ciega en el Señor, en medio de un misterio que no comprendíamos, y a invocar a Magdalena Sofía en este momento difícil, como los que ella vivió. En ese tiempo tuve una relación intensa con Magdalena Sofía a la cual experimenté muy viva entre nosotras. Desde entonces yo decía que tenía con ella “una amistad particular”. En Enero pasábamos a Roma, pero antes nos llegaron las cruces de profesa. Las pusimos todas alrededor de la châsse unidas unas a otras, pidiéndole que nos mantuviera siempre unidas, y así ha sido: nuestra probación de la “Communion fraternelle à la suite du Christ”, nos hemos reunido presencialmente después, en tres ocasiones: a los 25 años en Jette, a los 40 en Joigny, y a los 50 en Roma, todos lugares llenos de su presencia. Y ya seguimos conectadas entre nosotras siempre, por e-mail primero, y desde el covid por zoom todos los años en el aniversario de nuestra profesión, en el que tenemos muy presentes bajo la mirada de Magdalena Sofía a todas nuestras hermanas tanto a las que ya nos acompañan desde la casa del Padre, como a las que abandonaron la congregación, pero siguen en nuestra oración y unión y todas animándonos a seguir entregando nuestra vida hasta el final.
Desde siempre la oración favorita de Magdalena Sofía: “Corazón de Jesús acudo a ti …” me llegó hondo. Actualmente cuando la rezo cada día y miro su imagen, me parece que la estoy rezando con ella.
Así siento que cada día acompaña mi caminar.

Gracias Clara!
Gracias Clara. De niña recibí de premio de Religión «La Glorificadora» que leí con avidez durante el verano. Lo que más me ha gustado siempre de Sofía ha sido: su Amor a Jesús, lo humana que era y su amor a los pobres.
Ella sigue caminando con nosotras en esta etapa de las Nuevas Provincias y en nuestra Misión en este mundo tan convulso pero Bendecido. Ya nos contaremos cómo vamos a celebrar el centenario de su Canonización.
Un abrazo para ti y tu comunidad.
Clara. Muchas gracias por compartir. Un abrazo
Carissima Clara, amica cara e vigile a mantenere unito il gruppo delle probaniste 1967/68, anno del Capitolo speciale e di transizione di una congregazione semi contemplativa e di vita attiva, a una congregazione apostolica… La Probazione a Jette Bruxelles è stata la grande opportunità per conoscere intimamente la Santa Madre che giaceva nella grande cappella gotica. Quante confidenze, preghiere e contemplazioni dell’amore di Gesù abbiamo intessuto accanto alla sua urna. Io in particolare stavo a lungo con la testa appoggiata al vetro. Ma la mia amicizia era cominciata al noviziato, quando le chiedevo: «Se ho sbagliato strada, dimmelo!… Madre de Valon incontrata a Trinità dei Monti, mi ha detto: «Ma petite, notre Sainte Mére vous appelle à Jette…» Ecco la risposta materna dopo cinque anni.