En nombre de la Provincia de España de las Religiosas del Sagrado Corazón, queremos sumarnos al dolor por el fallecimiento del Papa Francisco y expresar nuestro profundo agradecimiento por su vida entregada y por su legado para la Iglesia y para el mundo. El Papa Francisco encarnó la misericordia de Dios en su ternura y respeto hacia cada persona independientemente de sus circunstancias, en su trabajo incansable por la paz y el diálogo entre los pueblos, en su amor evangélico hacia los últimos y descartados; también en su inquietud por los retos que plantean los jóvenes, en su anhelo por el reconocimiento de las mujeres, en su preocupación por el cuidado de la creación…
Gracias, querido Papa Francisco, hermano de todos y peregrino de esperanza también en la enfermedad. Gracias por tu última encíclica sobre el Corazón de Jesús, en ella nos invitas a “vivir la alegría de intentar comunicar el amor de Cristo a los demás”. (DN, 216). En el gozo de su Pascua definitiva celebramos también la tuya, y no nos olvidamos de rezar por ti.
Núria O’Callaghan y Consejo Provincial
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